Carlos Cunha, colaborador de la CNT, el local donde trabajaba funcionaba como buzón. No tenía otra actividad política. Secuestrado el 5 de mayo de 1980, trasladado aproximadamente el 20 de junio al Batallón de Infantería 14 y en setiembre del mismo año al Penal de Libertad.
Entrevista realizada por Fabiana Larrobla (C. Políticas).
”estaban vestidos como nosotros así, eran jóvenes aparte. Había por ejemplo el que me mostró los libros esos, que quería que yo identificara gente, era un veterano. Tenía una camisa militar, de esas camufladas, y era un veterano, un viejo. Pero después lo que nos cuidaban eran todos como nosotros, jóvenes.
Fragmento de la entrevista
Transcripción completa de la entrevista
00:00:02
CARLOS CUNHA: Buenas tardes, mi nombre es Carlos Cunha. Tengo 66 años. Fui detenido el 5 de mayo de 1980 y estuve hasta el 19 mayo de 1984 detenido. Tengo 66 años, dos hijos y tres nietos.
00:25:15
CC: Estaba colaborando con la CNT y con el SUNCA en la parte de propaganda. Yo tenía un salón en La Comercial y un poco ahí llevaban los materiales y los pasaban a buscar, materiales de propaganda y eso.
00:46:21
CC: El 1º de mayo fueron detenidos unos compañeros del SUNCA en una volanteada. Y bueno, el 5 me fueron a buscar a mí. Yo estaba en la casa de un amigo, en un asado, y cuando vine para mi casa, serían las 9 de la noche, me estaban esperando en las azoteas, en los jardines, por todos lados. Y y me llevaron ahí.
01:14:10
CC: Sí, ellos inclusive sabían dónde estaba yo. O sea, sabían dónde estaba comiendo el asado, y ellos estaban con un auto ahí. Entonces dejaron que yo me subiera a otro auto y viniera para mi casa. Cuando yo me bajé, vi una sombra en la azotea y dije «acelerá, vámonos». Pero estaba el auto que nos venía siguiendo, que se nos metió así. «Quedate quieto», ta.
01:44:25
ENTREVISTADORA: ¿Vos tenías idea? ¿Alguien te había avisado algo?
CC: Sí, yo tenía idea de la realidad que se vivía, de la represión. Todos los días caían compañeros, alguno se tenía que ir. Pero ta, hasta ahí.
E: Cuando vos empezaste a colaborar, ¿te contactaron?
CC: Sí, claro. Unos compañeros me pidieron si podía hacer eso y les dije que sí.
E: ¿Vos no eras militante político?
CC: No, no era. Yo fui militante estudiantil en esa época, era muy joven y no era militante de algún partido.
E: ¿Cuántos años tenías?
CC: Tenía 25.
E: O sea que vos estabas en el salón y dijiste «sí» porque eran amigos tuyos.
CC: Sí. Venía una persona, dejaba un paquete y al otro día venía otra persona y retiraba el paquete y nada más.
E: ¿Vos no sabías ni lo que tenía?
CC: No, yo ni los revisaba.
E: Y cuándo empezaron a caer compañeros, ¿alguien te avisó o supiste algo?
CC: Me avisaron sí que cayeron compañeros. Y bueno, estábamos ahí a la expectativa un poco.
02:49:07
CC: Bueno, ahí me pusieron una capucha, me tiraron adentro de una combi, revisaron toda mi casa y me llevaron.
E: ¿Y quedó tu pareja ahí?
CC: Sí, quedó con mi hijo ahí.
E: ¿Cuántos años tenía tu hijo?
CC: Mi hijo tenía 3 años.
E: ¿Y eran hombres vestidos de particular?
CC: De particular sí, eran como 20.
E: ¿Se identificaron?
CC: Había en los techos, en todos lados. No, sacaron los revólveres.
E: ¿Te preguntaban por algo mientras estabas ahí?
CC: Me preguntaron sí, por otros compañeros. Por fulano, mengano. Y ya en el momento que me tiraron al piso de la combi ya me preguntaron, ahí a la pasada nomás.
03:39:17
CC: Fuimos derecho para ahí, enseguida empezaron a torturar, enseguida me colgaron del gancho, fue así. En el mismo instante que me bajaron ya me colgaron y me empezaron a dar picanas y eso.
E: ¿Vos tenías idea de…?
CC: Yo tenía idea de todo, pero no sé, no lo esperaba. Yo tenía tan poca participación que pensé que lo mío no… no sé, no iba a saltar ese dato. Porque yo no era militante, no era del SUNCA, no era del CNT, solo era independiente y solo había hecho una colaboración. Pero sabía la realidad, sabía lo que nos estábamos jugando, sabía lo que pasaba, sabía todo, no era tampoco que yo no pensara que corría riesgo. Yo sabía que corría riesgos.
04:43:08
CC: Me torturaron varios días. Me dejaban medio inconsciente ahí tirado y después me volvían a llevar y así estuve tres días más o menos.
04:54:23
CC: Sí, eso sí, que me cambiaban de lugar sí, porque había otros presos donde me dejaban tirado ahí. Yo sentía que había respiración, que había gente. Me llevaban a un cuarto, a un lugar donde me torturaban. Y después me traían donde estaban los demás.
E: ¿Tenías que subir escaleras para ir a la sala de torturas?
CC: Sí. Me parece que sí, que tenía que subir escaleras.
E: ¿Identificaste si era siempre la misma?
CC: Me parece que sí, que eran siempre las mismas.
E: ¿Era como un lugar que estaba preparado para eso?
CC: Sí, claro.
05:28:04
E: ¿Cuánta gente te parecía a vos que había ahí? ¿Cuánta gente de compañeros detenidos?
- Detenidos había capaz que más de 10, 15.
E: ¿Nunca te levantaste la capucha?
CC: Me levantaba la capucha para comer por ejemplo, pero no veía nada porque estaba contra la pared. Y veía de pronto que había alguien al lado, pero no podía ver el sitio donde estaba.
E: ¿Ni hablaban ni nada?
CC: No, no podíamos, no.
E: ¿Había guardia?
CC: Había uno que estaba ahí arriba de nosotros.
E: ¿Y la comida?
CC: La comida eran unos fideos aplastados así, un pelotón de fideos. Esa era la comida. Y un pan.
06:14:07
CC: Eso me lo dieron al tercer día por ahí, porque yo los primeros dos días estuve como inconsciente. Como que no solo no comía, no despertaba mucho. Así como me traían me llevaban, y despertaba con la tortura. Pero estaba como medio inconsciente así, no estaba ni para comer ni para nada.
E: Cuando te dieron la comida ahí, después, ¿te dejaron de torturar después del tercer día más o menos?
CC: Después del tercer día me dejaron de torturar, sí.
06:51:24
CC: Una cosa que me afectó mucho fue que… cuando me agarran, yo estaba en un auto con un compañero que hacía seis meses que había salido por otro tema, preso político también pero no por lo mismo. Me preguntaban mucho por él. Si estaba metido, “¿se metió de vuelta?” Sabían toda la historia de él. Y bueno, me preguntaban mucho por él. Y yo les decía que no, que había salido hacía seis meses, que no quería saber más nada, que estaba tranquilo. Y un día viene uno y me levanta la capucha así y me dice «te tengo que decir algo”. «El petiso» le decían ellos. «El petiso no aguantó, lo trajimos y no aguantó. La quedó ayer». Eso me mató, porque era muy amigo mío y yo en el estado de inconsciencia que estaba, no llegaba a discernir. El tipo me podía estar mintiendo. Yo lo tomé así como me lo dijo. Pero me quebró de una manera tremenda. Me dice «el petiso no aguantó, la quedó ayer». Fue tremendo.
08:03:01
CC: Después de esos tres días estuve unos 45 días ahí, hasta que fuimos al juez.
E: ¿Y en esos 45 días después de esos tres días?
CC: Yo tuve problemas gastrointestinales porque no podía ir del cuerpo. Como a los 20 días más o menos viene el médico y me dice «¿usted ha ido de cuerpo?» Le digo: «no». «¿Cuánto hace que está?» «No sé, me parece que como 20 días o 15 que estoy acá”. Y entonces me dijo: «pero no puede ser, usted tiene que haber ido de cuerpo”. «No, yo no». “¿Pero usted come?» «Sí, yo como» . «¿Come la comida que le dan ?» Le digo: «sí, como la comida que me dan, no comí los primeros días pero ahora estoy comiendo». «¿Y no ha ido de cuerpo?» Le digo: «no». Entonces me mandó unas pastillas de Buscapina. Y a la semana volvió el médico. Me dice «usted era que no iba de cuerpo, ¿no? «Sì». «Fue?» «No» «¡¿Cómo?!» «No, no fui» “Bueno, vamos a aumentarle la dosis», no sé cuanto. Habló con los que estaban cuidándome ahí, les dijo «aumentale la dosis al doble porque no puede ser, se va a morir este hombre si no fue de cuerpo». Y bueno, recién a los 45 días fui de cuerpo. Cuando me dijeron que iba al juez, dice «vení que te vas a bañar para ir al juez», ahí sí fui de cuerpo.
09:35:17
CC: Me llevaron un par de veces, me enfrentaron a un compañero por ejemplo. Sin pegarme a mí, lo estaban torturando a él, y me mostraron así.
09:49:00
CC: Como que yo estaba detenido y me volvieron a traer. Después en otra me sentaron en un escritorio, así en una mesa, para que yo identificara gente. Me empezaron a mostrar unos libros con fotos de requeridos, de presos, de fugados, de exiliados, de militantes de distintos partidos y me hicieron… eso duró dos horas, me dieron un cigarro como premio. Pero yo les señalé a los diputados, a los senadores del Frente Amplio, a los que conocía.
10:26:12
E: ¿Nunca se estableció diálogo entre los presos?
CC: No, no, no.
E: ¿Y a tu familia no le comunicaron nada o le comunicaron dónde estabas o qué qué pasó con tu familia?
CC: No, a mi familia no hasta que yo fui al cuartel no le comunicaron nada, hasta que yo salí de ahí, que fui al juez, no le comunicaron nada.
10:46:21
CC: Y bueno, después nos llevaron a cuatro compañeros nos llevaron al cuartel de Toledo, de los paracaidistas. El 14. Y ahí también fue tremendo. Estuvimos tres meses, ahí ya teníamos visita por ejemplo, pero nos daban cada paliza, todas las noches nos daban palizas, nos pegaban pero… así.
E: ¿Por qué?
CC: Por gusto, no nos preguntaban nada. Llegaba la hora de ir al baño por la noche, y nos llevaban al baño y ya nos daban. Había por ejemplo uno que estaba muy deteriorado, que no le podían pegar porque se estaba muriendo el hombre, medio veterano. Después éramos tres jóvenes y uno era asmático, que tampoco le podían pegar mucho porque el loco se atacaba. Y entonces quedábamos dos, quedábamos los dos más jovencitos que todas las noches… creo que no sé, de tres meses que estuve ahí, ponele 90 noches, 75 nos ligábamos la paliza. Te pisaban las manos, te pegaban, te boxeaban, te hacían simulacro de fusilamiento, te llevaban contra una pared cinco milicos con escopeta. «Bueno, decí tus últimas palabras, sacate la capucha, ¿querés ver o no querés ver?» Todas esas cosas que te hacen, que vos sabés que no te van a fusilar, que ya está el pescado vendido, pero que de cualquier manera tenés que pasar por eso. O sea, te la tenías que comer y simular como que tenías miedo que te fueran a fusilar para que ellos se quedaran satisfechos. Sino te cagaban a palos otra vez.
12:34:05
E: ¿Antes de ir al juez te anunciaron algo o solamente te llevaron a bañarte?
CC: No, me dijeron «vení que te tenés que bañar que vas a ir al juez».
E: Era la primera vez que te bañabas ahí?
CC: Sí. Y bueno, ta. Ahí ya a las 6 de la mañana me bañaron y fuimos al juez a las 7 o las 8, y al otro día creo que ya me trasladaron.
E: ¿Nunca pudiste distinguir la guardia quién era o quiénes eran?
CC: Eran de particular, en el CGIOR eran de particular.
E: ¿No había soldados?
CC: No, estaban vestidos como nosotros así, eran jóvenes aparte. Había por ejemplo el que me mostró los libros esos, que quería que yo identificara gente, era un veterano. Tenía una camisa militar, de esas camufladas, y era un veterano, un viejo. Pero después lo que nos cuidaban eran todos como nosotros, jóvenes.
E: Y de particular.
CC: Y de particular, sí.
13:37:15
E: Y todo ese tiempo que estuviste, estuviste…
CC: Claro, estuviste contra una pared, comiendo un plato de fideos, yendo al baño y viniendo y nada màs. Sin diálogo con nadie, la música muy alta para que en el cuarto de arriba…
E: Después que vos caíste ahí, ¿percibiste que hubieran otras detenciones después de que vos llegaste?
CC: Sí, claro, sí. Permanentemente era.
14:01:27
E: ¿Era un lugar grande o chico?
CC: Sí, era un lugar grande, tipo un gimnasio así donde estábamos nosotros. Un cuarto grande.
E: ¿Estaban todos juntos?
CC: Sí.
E: ¿Les daban algo para dormir?
CC: No, no te daban nada
E: ¿Contra el piso ero?
CC: Sí sí.
E: Ni para taparse ni para nada. Había frío?
CC: No, no. Que yo me acuerde, no había frío.
14:25:19
CC: Todavía con el problema que yo tenía intestinal, ¿no? O sea, que…
E: ¿Y eso después se te solucionó?
CC: Sí, sí. Normalmente. Sí, tenía 25 años, si me pasa ahora eso no cuento el cuento.
E: ¿Quedaste con alguna con alguna otra complicación? Con algún efecto así como…
CC: No, no.